Hormigón y seguridad en la albañilería
El hormigón húmedo se desplaza por la tolva de un camión hormigonera para su colocación.
Fecha de Publicación: 05/11/2024
El hormigón es un material de construcción habitual en la industria de la construcción. El hormigón se fabrica generalmente combinando cemento, arena, conglomerado (pequeñas piedras) y agua. Algunas aplicaciones del hormigón requieren la adición de otros materiales que podrían afectar negativamente a la salud si se manipulan incorrectamente o no se toman las precauciones adecuadas. Las adiciones pueden incluir compuestos alcalinos (como la cal) que son corrosivos para el tejido humano. La sílice cristalina puede ser abrasiva para la piel y causar daños pulmonares, y pequeñas cantidades de cromo pueden provocar reacciones alérgicas. Según la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA), más de 250.000 personas trabajan en oficios relacionados con el hormigón o la albañilería. Más del 10 % de esos trabajadores (28.000) sufrieron una lesión o enfermedad relacionada con el trabajo, y 42 murieron en solo un año.
Peligros al trabajar con hormigón
Irritación de los ojos, la piel y las vías respiratorias por exposición al polvo de cemento.
Protecciones de seguridad inadecuadas en los equipos.
Riesgo ergonómico (sobreesfuerzos y posturas incómodas).
Resbalones, tropiezos y caídas.
Quemaduras químicas por hormigón húmedo o seco.
Espacios confinados
Exposición al ruido
Las distintas fases del trabajo con hormigón presentan distintos riesgos
Riesgos de formación: El encofrado del hormigón es el proceso de crear marcos sólidos para mantener el hormigón en su sitio mientras fragua después de verterse. La mayoría de los proyectos de hormigón requieren encofrados antes incluso de encargar o mezclar el hormigón. Es necesario utilizar encofrados estructuralmente sólidos para mantener el hormigón en su sitio y evitar que se derrumbe. Los riesgos durante esta etapa incluyen:
Caídas de trabajadores durante la fijación del acero (atado de barras de refuerzo) y el montaje del encofrado.
Colapso del encofrado.
Materiales caídos durante el desencofrado.
Exposición al polvo de sílice.
Manipulación manual de materiales como encofrados, barras de refuerzo (ferralla), etc.
Irritación cutánea.
Riesgos de mezlas: El polvo de cemento desprendido durante el vertido de sacos o el corte de hormigón puede irritar la piel. La humedad del sudor o de la ropa mojada reacciona con el polvo de cemento para formar una solución cáustica. La exposición al polvo de cemento puede irritar los ojos, la nariz, la garganta y las vías respiratorias superiores. Las infecciones y enfermedades incluyen la silicosis, una enfermedad pulmonar progresiva. La exposición puede producirse al lijar, esmerilar o cortar hormigón, trabajando en zonas de descarga, sistemas de recogida de polvo y zonas de almacenamiento. Los trabajadores deben comer y beber en zonas libres de polvo de cemento.
Riesgos de colocación: El hormigón es resbaladizo cuando está mojado. Si la mezcla húmeda llega a las botas de un trabajador o al suelo, puede crear un peligro de resbalón. Además, las propiedades alcalinas del cemento húmedo pueden ser cáusticas para la piel y provocar quemaduras. Los peligros durante esta etapa incluyen los siguientes:
Caídas desde superficies inestables o sin apoyo. Pisar encofrados y barras de refuerzo atadas que pueden no soportar el peso del trabajador.
Puntos de pinzamiento.
Atropellado por vehículos o componentes de vehículos (por ejemplo, camión bomba o manguera de camión)
Empalamiento por barras de refuerzo sin protección u otros peligros de empalamiento.
Las barras de refuerzo se muestran con tapas protectoras de color naranja instaladas para evitar la abrasión y el empalamiento.
Nota: De conformidad con WAC 296-155-680 y WAC 296-880-10010 todo el acero de refuerzo que presente un peligro de empalamiento debe estar protegido.
Riesgos de acabado: El acabado del hormigón es un proceso que se esfuerza por crear una superficie lisa y duradera. En el acabado del hormigón, el tiempo es crucial y debe prestarse mucha atención al estado del hormigón durante este proceso. Los riesgos durante esta etapa incluyen los siguientes:
Peligros eléctricos aéreos. Tenga cuidado cuando trabaje con un flotador. Algunos mangos tienen más de 20 pies (6 metros) de longitud.
Los trabajadores deben tener acceso a las fichas de datos de seguridad y comprenderlas antes de realizar un trabajo que presente un riesgo químico.
Si se manipula hormigón seco y se levanta polvo, puede haber riesgo de sílice. Esto puede ocurrir al cortar hormigón sin agua para controlar el polvo, al limpiar los contornos con una manguera de aire o al barrer en seco.
Una cuadrilla trabaja en la colocación de hormigón.
Cómo trabajar con hormigón de forma segura
Protéjase los ojos: Mantenga alejados de sus ojos el cemento, las partículas volantes, el polvo y cualquier otro peligro transportado por el aire. Llevar lentes protectoras de seguridad al verter o trabajar con hormigón húmedo. Si le entra hormigón húmedo en los ojos, puede causarle quemaduras graves. En algunos casos, puede incluso causar una pérdida de visión permanente.
Proteja la espalda: Todos los materiales utilizados para fabricar hormigón, cemento, conglomerado grueso, arena y agua son pesados, incluso en pequeñas cantidades. Muchas lesiones relacionadas con el hormigón son el resultado de malas prácticas de elevación. Al levantar materiales pesados, la espalda debe estar recta, las piernas flexionadas y el peso entre las piernas lo más cerca posible del cuerpo. No tuerza la cintura al levantar o transportar estos artículos.
Proteja la piel: El contacto con cemento de mortero de hormigón o mezclas de cemento húmedas o sin endurecer puede provocar irritación cutánea, quemaduras químicas graves o lesiones oculares graves. Utilice guantes resistentes a los álcalis para proteger las manos y los brazos cuando vierta o trabaje con hormigón húmedo. Lávese inmediatamente la piel mojada de hormigón, mortero, cemento o mezclas de cemento. Además, lleve ropa de manga larga, incluyendo camisa y pantalones, cuando vierta hormigón húmedo. Aunque los guantes le protegerán las manos de las quemaduras relacionadas con el hormigón, no le protegerán los brazos o piernas.
Proteja el sistema respiratorio: Si las evaluaciones de exposición al polvo justifican la protección respiratoria, puede ser necesario el uso de mascarillas de respiración con filtro.
Recursos
WAC 296-155-675 - Hormigón, encofrados de hormigón, apuntalamiento y construcción de mampostería
Documento de orientación de la Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo - Prevención de problemas cutáneos derivados del trabajo con cemento Portland
Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (NIOSH) - Guía para trabajar de forma segura con sílice
