Serie de ergonomía – Proteja su espalda
Fecha de Publicación: 02/15/2024
Conforme a la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, por su sigla en inglés), más de un millón de trabajadores sufren lesiones de espalda cada año, lo cual representa una de cada cinco lesiones o enfermedades en el sitio de trabajo. Cuando se considera la industria de construcción en especial, el Center for Construction Research and Training (CPWR) declara que la industria de construcción tiene la tasa más alta de lesiones de espalda que cualquier industria con la excepción de transporte. De todas las lesiones relacionadas con la construcción que suceden cada año, el 25 % son lesiones de espalda. Cada año, una lesión de espalda causa que 1 de 100 trabajadores de construcción falten al trabajo; normalmente faltan alrededor de siete días de trabajo pero algunas veces más de 30. La mayoría de los problemas de espalda son lesiones de la zona lumbar, incluso esguinces y distensión debido a levantar, bajar, cargar, empujar y jalar materiales.
Prevención de lesiones de espalda
Use el equipo de protección personal (EPP) indicado. Al levantar, la sujeción es fundamental. El usar guantes de buen ajuste con una superficie adherente ayudará a sujetar bien los objetos al levantar. Los zapatos o las botas con suelas de buena tracción también le ayudarán a mantener el equilibrio y la estabilidad al levantar.
La preparación es vital. Antes de levantar, determine si el objeto tiene que levantarse. Utilice dispositivos de elevación como carretillas, gatos elevadores u otro equipo de elevación. La idea es llevar la carga lo más cerca posible a su destino con la menor cantidad de esfuerzo físico que sea posible.
Reduzca el peso si puede; si puede dividir la carga en dos porciones o más, hágalo.
Trate de ajustar la altura de la carga. El levantar desde el piso le causará más estrés a su cuerpo que levantar desde la altura de la cintura. Una lesión es más probable si levanta un objeto por encima de sus hombros.
Planifique la ruta más corta y libre de obstáculos que pueda tomar.
Haga estiramiento antes de levantar.
Técnicas para levantar de forma segura
Evalúe la situación: Antes de levantar o cargar un objeto pesado, hágase las siguientes preguntas:
¿Puede levantar esta carga de forma segura, o se necesita a una segunda persona?
¿Qué tan lejos tendrá que llevar la carga?
¿El camino está libre de desorden, cables, áreas resbalosas, voladizos, escaleras, bordillos o superficies desiguales?
¿Se topará con puertas cerradas que tienen que abrirse?
Una vez que levante la carga, ¿bloqueará su vista?
¿La carga puede dividirse en partes más pequeñas?
¿Debe usar guantes para poder sujetar mejor y proteger sus manos?
Evalúe la carga:
Pruebe el peso al levantar una de las esquinas. Si está muy pesada o tiene una forma irregular, deténgase.
Si hay cualquier duda, pida ayuda a sus compañeros.
Trate de usar un elevador mecánico o carretilla de carga.
Trate de dividir la carga en partes más pequeñas.
Utilice buenas técnicas para levantar:
Acérquese a la carga. Céntrese sobre la carga y párese con los pies separados al ancho de los hombros.
Contraiga los músculos del estómago. Los músculos abdominales contraídos aumentan el apoyo para la espalda.
Encuentre un buen lugar para sujetar y jale la carga hacia usted. Entre más lejos esté de su cuerpo, más pesada se va a sentir.
Doble las rodillas. El doblar las rodillas es lo más importante que puede hacer al levantar objetos moderados a pesados. Agáchese con como si estuviera levantando pesas, doble las rodillas, mantenga su espalda con su arco natural y permita que sus piernas levanten el peso. Los músculos de sus piernas son mucho más fuertes que los músculos más pequeños en su espalda.
No jale con brusquedad. Use un movimiento fluido y levante directo hacia arriba.
No tuerza ni doble su cuerpo al levantar. Mantenga la cabeza elevada y fije la mirada hacia enfrente. Mantenga la carga cerca y estable.
Cómo transportar la carga:
Cambie de dirección al voltear los pies, no la espalda. Su nariz y los dedos de sus pies siempre deben apuntar en la misma dirección. Cualquier torcedura repentina puede resultar en una lesión de la espalda. Descanse si se fatiga. Baje la carga y descanse por unos minutos.
Cómo bajar la carga:
Doble las rodillas. Agáchese y permita que sus piernas hagan el trabajo.
Mantenga las curvas de la espalda. Recuerde no torcer su cuerpo al bajar la carga, y mantenga la cabeza elevada.
Mantenga la carga cerca de su torso.
Planifique cómo lo va a soltar. Una vez que la carga esté donde la quiere, suéltela. Nunca suelte la carga hasta que esté asegurada.
Utilice carretillas de carga (plataformas rodantes) y carritos de transporte
Empuje en lugar de jalar. Es más fácil y más seguro empujar que jalar. Puede usar el peso de su cuerpo para ayudarle al empujar.
Mantenga sus brazos cerca y fijos. Permanezca cerca a la carga, evite inclinarse hacia enfrente y mantenga su espalda con sus arcos naturales.
Use ambas manos. Los carritos de transporte son más fáciles de empujar y controlar con ambas manos.
Utilice sujetadores, de ser necesario, para asegurar la carga.
Recursos
Aplicación NIOSH de ecuación para levantar: NLE Calc | NIOSH | CDC
Guía de prácticas laborales para el levantamiento manual (81-122) | NIOSH | CDC
Ergonomía y trastornos musculoesqueléticos | NIOSH | CDC
Lluvia de ideas para soluciones de ergonomía (adobeconnect.com)